lunes, 15 de mayo de 2017

Causalidades literarias

Siempre he dicho que lo mejor de ser librero es que te lleva a conocer a personas extraordinarias y a establecer con ellas magníficas complicidades, y que lo mejor de la literatura son esas causalidades, extensión de lo antedicho, que se hacen pasar por casualidades y que permiten, en palabras de Ítalo Calvino, "buscar y saber reconocer quién y qué, en medio del infierno, no es infierno, y hacer que dure, y dejarle espacio".

Así, a causa de Tusitala conozco a Isabel Sánchez Fernández, bibliotecaria en Salamanca y lectora dondequiera que vaya, que me ofrece la posibilidad de presentar Aniversario en la Feria del Libro de su ciudad; una presentación que resulta cómoda y sugerente como el principio de una buena amistad. Y quiere el azar de las letras que ese mismo día, el viernes pasado, cierre la jornada Luis Landero con La vida negociable y su vitalidad de escritor risueño, amable pero certero, maestro de ceremonias de una cena que transcurre plácida en la Plaza Mayor, entre chanzas y lamentos por el tiempo que nos ha tocado vivir, que en tan buena compañía a mí se me antoja el mejor de los posibles. La conjunción entre extremeños y castellanos parece disolverse con la noche, pero queda en el paladar un regusto a camaradería, a Amistad a lo largo que diría Gil de Biedma, que promete reanudarse a poco que, causalidad literaria mediante, los conjurados vuelvan a reunirse en alguna otra parte.

Se diría suficiente causalidad para un solo fin de semana, en absoluto: el domingo visitamos Urueña, localidad vallisoletana que ostenta el maravilloso título de Villa del Libro, a causa del fenomenal número de librerías que alberga en su pequeño espacio amurallado. Borges hubiera encontrado en Urueña su sueño y su villa de las librerías que se bifurcan, o tal vez incluso el mítico aleph (véase más adelante). Al entrar en la primera de las librerías, llamada Primera Página, nos sorprende la buena selección de libros sobre fotografía y periodismo: ninguna sorpresa cuando descubrimos que nos atiende Fidel Raso, que nos habla con tanta firmeza como melancolía de dos de sus más premiadas y estremecedoras fotos. Supongo que si Ryszard Kapuściński se hubiese retirado en España, también se habría dejado llevar a Urueña para compartir una librería.

Todavía nos queda recorrer más librerías (son tantas que se hace difícil llevar la cuenta) y tomar café y conversación en La Real, tienda de productos de la tierra y selecta cafetería regentada por Alison, que lee La España vacía de Sergio del Molino. Su lectura es pretexto para una charla que nos lleva de Pete Seeger a Joaquín Díaz, alma mater de la Villa del Libro, y a la amistad de Alison con el librero madrileño de El Aleph, librería borgiana por laberíntica a la cual llevé en mis inicios ejemplares de mi primera novela, qué recuerdos. Así que, con un librero en común, Alison se interesa por leer Aniversario y por conocer Tusitala (cuento ya varios futuros visitantes en este fin de semana), y nos marchamos con la impresión de que el viajero no va por única vez a Urueña, porque es como si siempre se hubiera estado antes allí, en la acogedora y asombrosa Villa del Libro. De la misma manera, el viajero sabe que el regreso a Tusitala, donde empezó todo gracias al buen gusto de Isabel, se convertirá en punto de partida de nuevas causalidades literarias. Que no falten.

sábado, 6 de mayo de 2017

Próximos Aniversarios

Hoy sábado 6 de mayo presentamos Aniversario en la localidad donde pasé mi infancia, Fuente del Maestre (Badajoz). Será a partir de las 21:00 horas en la Casa de la Cultura. Me acompañará el profesor de literatura José María Santiago.

El próximo viernes 12 de mayo estaremos en la Feria del Libro de Salamanca, presentando Aniversario en compañía de la bibliotecaria Isabel Sánchez Fernández. Será a las 13:00 horas en la carpa de presentaciones de la feria, sita en la famosa Plaza Mayor.

Además, el lunes 22 de mayo firmaré ejemplares de Aniversario en la Feria del Libro de Badajoz, en su Plaza de San Francisco. Será de 19:00 a 19:30 horas en la carpa de firmas del ayuntamiento.